Esa y muchas otras eran algunas de las preguntas/queja que nos han ido lanzando al aire en las diferentes charlas de orientación que desde enero vamos dando en distintos colegios, tanto a alumnos como a padres. Surgía cuando explicábamos a las familias de alumnos de 4º ESO cómo escoger el bachillerato a estudiar el próximo curso y cómo se tenía que hacer en función de la nueva selectividad y el grado que fuesen a estudiar sus hijos.
Ahí residía la cuestión. Quizás esté mal planteada la explicación de esta elección. Con la nueva ley (LOE) desde cualquier modalidad de bachillerato se puede acceder a cualquier grado universitario. Lo que parece algo positivo para los que no tienen clara su elección, se convierte en un importante hándicap cuando ven que si quieren mejorar la nota de la selectividad (haciendo la parte específica, voluntaria) sólo lo van a poder hacer si han elegido la modalidad “idónea” para el grado deseado. Aquí venía la lamentación: “con 15 años le tengo que pedir que me diga si va a ser ingeniero o periodista”.
En realidad siempre ha sido así. Los que pasamos por esta prueba hace muchos años y unas cuantas reformas educativas también teníamos que tener claro a la hora de hacer nuestro BUP y nuestro COU que si queríamos estudiar medicina la opción no podía ser ni la de “letras” ni la tan socorrida opción “mixtas”. Pues ahora igual, con algunos cambios en la estructura de la prueba que incluso le dan más protagonismo a las elecciones del alumno que antes (¡qué injusto era que las asignaturas de modalidad que te caían en selectividad se escogían a sorteo!) pero en el fondo todo muy parecido en esencia.
En definitiva, nada ha cambiado. Los miedos y lamentaciones de los padres de ahora son los mismo que tenían los de antes y si bien ahora parece que solo para entender el funcionamiento de la selectividad hay que hacer un máster, en el fondo es más de lo mismo. Incluso la tan temida prueba oral de inglés que empezará a hacerse en el año 2012 no será tal prueba oral y se quedará, como mucho, en un mero “listening”.